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que la monotonía de su trabajo lo lleve por el camino de la obesidad
La
obesidad es una epidemia que afecta a personas de los cinco continentes, y que
además del exceso de peso, se acompaña de múltiples problemas de salud física y
mental. Aquí te damos algunos trucos fáciles que te ayudaran a evitarla.
Aléjate
del estrés
La
inseguridad económica hace que las personas que viven en países regidos por el
denominado “libre mercado” sean más propensas a volverse obesas.
Antibióticos
con moderación
Está
demostrado que la exposición a antibióticos durante la infancia altera la
composición y el funcionamiento de las bacterias y el tracto digestivo,
fundamentalmente del estómago, con un impacto sobre el metabolismo que puede
predisponer a la obesidad.
Evita
los refrescos
Las
personas que consumen refrescos regularmente, tienen mayor susceptibilidad
genética a padecer la obesidad y a tener un índice de masa corporal (MC)
elevado.
Baja calefacción
Abusar
de la calefacción en el invierno podría estar contribuyendo al aumento de la
obesidad reducir la exposición al frío reduce la necesidad de consumir energía
para permanecer calientes y reduce la capacidad del cuerpo para producir calor.
Menos
televisión
Sentarse
frente al televisor por más de cinco horas al día potencia el sobrepeso.
Nueces,
ciruelas y nectarinas
Comer
nueces aumenta los niveles de serotonina, una sustancia que reduce la sensación
del hambre, mejora el estado de ánimo y reduce la obesidad abdominal. Por otro
lado los compuestos fenólicos antocianinas, ácidos cloro génicos, y catequinas
de los melocotones y las ciruelas tienen efectos anti obesidad, anti
inflamación y anti diabetes en diferentes partes del cuerpo.
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